Los inversores saben que incluso si algún día el BCE se retirara por completo de los mercados, siempre podría volver en caso de ser necesario. Draghi se ocupó de dejar abierta la opción de una reversión de rumbo.

El hecho de que el euro haya perdido el nivel de los US$ 1.16 se debe a que el BCE ha adelantado que habrá que esperar cierto tiempo hasta que suban los tipos de interés y también debido a la crisis política catalana.

El dólar subió a un máximo de tres meses luego que el jueves el BCE extendió su programa de compra de bonos y de que la Cámara de Representantes de EE.UU. votó a favor de despejar el camino a una propuesta de reforma fiscal del gobierno.

La compra de deuda pública y privada que mantenía un ritmo de 60,000 millones de euros por mes, que expira a fines de diciembre del 2017, será reducida a 30,000 millones de euros mensuales entre enero y setiembre del 2018.

Según el ministro español de Economía, estas decisiones tomadas “libremente” no se deben a la posibilidad de una independencia que, a su juicio, “no se va a producir”.

Los resultados se conocen mientas el BCE se prepara para comenzar a retirar sus estímulos monetarios después de años de unos tipos de interés ultrabajos y enormes compras de bonos.

El Consejo de Gobierno del BCE, en el que se encuentra Villeroy, está tratando de determinar la cantidad correcta de apoyo monetario para la economía de la zona euro.

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Si la política extraordinaria de liquidez de estos bancos centrales tuvo efecto, su retirada es posible que también la tenga, en sentido contrario.

Las bajas tasas de interés, la impresión de dinero y una multa que penaliza el almacenamiento de efectivo han sido las principales medidas del BCE en un intento de revitalizar la economía de la eurozona de 19 países tras la crisis financiera de 2008-2009.

“La apertura al comercio está bajo amenaza, y esto significa que las políticas dirigidas a responder a esta reacción negativa son una parte vital de la mezcla de políticas para el crecimiento dinámico”, dijo el presidente del BCE.

Los inversores están a la espera de los discursos que pronunciarán el presidente del BCE y la jefa de la Fed, e intentarán detectar señales sobre la dirección que tomarán las tasas de interés, lo que podría afectar al dólar.

El BCE afronta a partir de otoño un reto importante: ajustar gradualmente las condiciones monetarias al entorno económico más favorable y evitar una sobrerreacción en los mercados

El Banco Central Europeo mantuvo hoy sin cambios sus principales tasas de interés así como como su programa masivo de compra de deuda y pidió paciencia a los mercados, que esperan un cambio de rumbo monetario.

El BCE mantuvo las tasas en mínimos récord y confirmó que su programa de compras de activos seguirá siendo de US$ 69,150 millones por mes al menos hasta diciembre y podría expandirse o extenderse, si se considerada necesario.

En una conferencia celebrada el martes en Croacia, Lagarde dijo que las rebuscadas propuestas de política monetaria y fiscal suelen usar terminología “que casi nadie entiende” y que apenas logran capturar la atención del público.

“La posición política se volverá más flexible, y el banco central puede acompañar la recuperación ajustando los parámetros de sus instrumentos políticos”, dijo Mario Draghi en una conferencia en Portugal.

La agencia calificadora señaló también que el crecimiento de la demanda se está recuperando con fuerza en las más grandes economías emergentes, como Brasil y Rusia.

Con los ahorradores quejándose de los bajos tipos de interés, los responsables de la mayor economía europea han elevado la presión sobre el BCE para que reduzca sus estímulos monetarios de compras de bonos y tipos negativos.

Después de seis años en su cargo, el presidente del Banco Central Europeo pudo por fin decir el jueves pasado que los riesgos para el crecimiento están equilibrados.

The Economist. Ajuste holgado. La inflación inactiva significa que las bajas tasas de interés siguen siendo “la única alternativa”.

“Esperamos que las tasas se mantendrán a su niveles actuales por un periodo prolongado en el tiempo”, dijo el presidente del BCE, Mario Draghi.

Los mercados también estarán atentos al testimonio del exdirector del FBI James Comey ante una comisión del Senado que investiga la supuesta intromisión de Rusia en la elección presidencial estadounidense del 2016.

Esta declaración rebaja las expectativas de países conservadores de la zona euro de recortar la política expansiva del BCE ante la reunión de política que celebrará el organismo el 8 de junio.

Se piensa que las tasas de interés negativas afectan la rentabilidad bancaria y hacen que el sistema financiero sea más vulnerable a conmociones. ¿Son preocupaciones erradas?

El presidente del BCE, Mario Draghi tachó de “sólida” la recuperación económica de la región, pero mantuvo el estímulo al nivel actual.

El BCE mantuvo su política monetaria ultraexpansiva en la medida en que la inflación en la zona euro sigue por debajo de su meta, pero reconoció el vigor de la economía de la zona euro.

En la última subasta de liquidez del BCE, del programa de financiación a largo plazo con objetivo específico (TLTRO II), las entidades europeas han demandado 233 mil millones de euros, más del doble de lo que esperaban los mercados, indicó Ana Rubio del BBVA Research.

Para la eurozona, un relajamiento de las normas bancarias es lo último que se necesita en estos momentos. Trump ha ordenado un estudio a regulaciones.

“Lo último que necesitamos en este momento es una relajación de la regulación”, dijo el presidente del BCE a la comisión de asuntos económicos del Parlamento Europeo en Bruselas.

El PBI en las 19 economías del euro aumentó entre octubre y diciembre un 0.5%, por encima del 0.4% registrado el trimestre anterior, mientras que la inflación se aceleró fuertemente al 1.8% en enero.

“La recuperación de toda la zona euro es del interés de todos, incluyendo de Alemania”, dijo Mario Draghi en respuesta a las críticas, especialmente en Berlín, contra su programa de estímulos.

La revisión de los resultados podría calmar la inquietud respecto a la solidez de capital del Deutsche Bank.

El BCE dijo que recortará las compras mensuales a 60,000 millones de euros desde los actuales 80,000 millones de euros, pero extenderá estas operaciones hasta fines de 2017.

El BCE también prevé para el 2017 una inflación al 1.3%, un punto porcentual por encima del 1.2% que calculaba hasta ahora.

Una serie de factores negativos para el oro y una menor demanda física en China e India provocaron que el metal precioso ampliara sus pérdidas de noviembre.

Los efectos adversos del referendo del domingo en Italia son malos para los bonos italianos, pero podrían ser mucho peores para una de las estrellas de este año en Europa: Grecia .

Las elecciones y los referendos podrían modificar el panorama político, desencadenando flujos de capital repentinos y volatilidad en el mercado, lo cual agravaría las dificultades de un bloque ya debilitado, dijo el BCE.

Parte de la preocupación del mercado en torno a la sorpresiva victoria de Donald Trump en su carrera a la Casa Blanca duró poco. Las acciones repuntaron, las mediciones de la volatilidad se desplomaron y la situación es propicia para captar fondos.

En el medio plazo una clave es continuar desarrollando políticas macroprudenciales, que velen por la estabilidad del sector financiero, según Agustín García y Alejandro Neut del BBVA Research.

En comparación con la forma en que se recuperó la inversión luego de anteriores recesiones en la eurozona, la recuperación actual es más fuerte en inversión que en consumo.

Mario Draghi dio pocos indicios sobre qué medidas podría tomar el banco más adelante este año para asegurar que las compras de activos continúen en forma fluida.

Si bien no se anticipa que BCE realice cambios en su programa de compra de activos sino hasta diciembre, los inversores aguardan a que Mario Draghi se refiera a los conjeturas de que el emisor podría empezar a reducir sus compras de bonos.

Presionados por tasas de interés negativas del Banco Central Europeo (BCE), los bancos alemanes buscan maneras de impulsar sus ingresos aumentando costos a clientes corporativos y cuotas a depositantes.

El presidente del BCE, Mario Draghi, dijo que el organismo estudiará opciones que le permitan seguir adelante con su programa de impresión de dinero sin precedentes.

La tasa referencial del BCE, que determina el costo del crédito en la economía, permaneció sin cambios en 0%, mientras que el tipo de interés para los préstamos de emergencia a bancos siguió en un 0.25%.

El BCE mantuvo sus tasas en mínimos récord, en momentos en que busca reactivar el crecimiento y la inflación de la zona euro con crédito barato.

Pese a que el caso de la Banca Monte dei Paschi di Siena es uno de los más extremos de Italia, su situación es solo un reflejo de lo que los experimentan todas las entidades financieras italianas producto de la gran carga de deuda que llevan consigo.

“Una vez que se ha aprobado el segundo pago del nuevo rescate griego, el BCE aprecia que se cumplen las condiciones para volver a aceptar deuda helena”, señaló Ana Rubio del BBVA Research.

El BCE ha aplicado estímulos sin precedentes en los últimos años, con recortes de sus tasas a territorio negativo y la compra de 1.7 billones de euros en deuda soberana y corporativa para reactivar el crecimiento y la inflación.

Fabricantes de maquinaria de billetes, asociaciones industriales y el BCE firmaron un memorando de entendimiento para subrayar su compromiso de asegurar que las máquinas expendedoras y otras máquinas que aceptan billetes acepten el nuevo billete de 50 euros desde la fecha de su emisión.