La misión del equipo, respaldada por el Consejo de Seguridad de la ONU la semana pasada, fue gestionada por Washington y Moscú después de un ataque con armas químicas del 21 de agosto en Damasco.

El Gobierno ruso considera que la destrucción del arsenal químico en territorio sirio “es la mejor opción”. Descartó así que pretenda llevar el armamento a su país.

Una caravana de cinco automóviles de Naciones Unidas con al menos ocho miembros del equipo arribaron en un hotel del centro de Damasco a fin de seguir investigando ataque contra civiles.

La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas confirmó que el ente recibió información del Gobierno sirio, la cual actualmente está siendo traducida.

Anders Fogh Rasmussen consideró que para mantener el impulso del proceso diplomático y político “es esencial” que la opción militar siga sobre la mesa.

La Organización de Naciones Unidas afirmó que el reporte, que confirma la utilización de gas sarín en el ataque contra civiles en Damasco, fue “totalmente objetivo”.

Equipo de investigación de las Naciones Unidas aseguró que en ataque a suburbio de Ghouta, en manos de rebeldes, fue empleado gas sarín, agente nervioso que provocó la muerte de decenas de civiles.

El informe de las Naciones Unidas contendría suficientes detalles para sugerir qué parte fue responsable de la muerte de civiles en Damasco hace dos semanas: si el gobierno de Bashar al-Assad o los rebeldes.

El primer ministro sirio, Wael al-Halki, aseguró que la administración de Bashar al-Assad respaldaba la iniciativa de Moscú “para evitar el derramamiento de sangre siria”.

El mandatario de Estados Unidos indicó que le ha hecho pedidos directos a Vladimir Putin para que varíe su posición, pero -dijo- hasta el momento se ha resistido a los esfuerzos por alcanzar una acción en el Consejo de Seguridad de la ONU.

Moscú podría sumarse a Estados Unidos en caso haya pruebas que demuestren que la administración del presidente sirio perpetró ataques químicos contra la población de Damasco.

La imagen difundida por The Daily Mail corresponde a una cena íntima que sostuvieron el actual secretario de Estado estadounidense con el presidente de Siria durante el 2009. Ahora el primero compara al segundo con Hitler.

El banco advirtió que un factor de riesgo para este escenario es el eventual aumento de las tensiones geopolíticas en el Medio Oriente, lo que podría empujar al alza el precio del petróleo e impactar en la inflación local.

El primer ministro francés, Jean-Marc Ayrault, aseguró que su país “no actuará solo” contra gobierno de Bashar al-Assad. Afirmó que Francia “está decidida a castigar el uso de armas químicas por parte del régimen del presidente sirio”.

Defendió el régimen de Bashar al-Assad. Para el mandatario venezolano, la acusación del uso de armas químicas de EE.UU. tiene “el tufo” de lo mismo que dijeron contra Irak. Exhortó a que el pueblo sirio tenga “derecho a la libre determinación”.

El ciberataque pareció ser obra del Ejército Electrónico Sirio, que recientemente también tuvo como objetivos la web del diario New York Times y Twitter.

Para el organismo, si se deja pasar por alto esa acción y no hay una reacción se “enviaría una señal peligrosa a los dictadores de todo el mundo”. “Necesitamos una respuesta internacional firme para evitar futuros ataques de ese tipo”, dijo.

El secretario de Estado de Estados Unidos aseguró que -según un reciente reporte- el Gobierno de Siria provocó la muerte de 1,400 personas la semana pasada con aparente ataque químico.

No obstante, el secretario general del organismo culpó al gobierno de Bashar al-Assad del presunto ataque químico perpetrado contra civiles en Damasco. “Se requiere un cinismo inimaginable para creer que la oposición es renposable”, dijo.

La Cancillería china dijo a las Naciones Unidas que Pekín respaldaba totalmente una inspección independiente y objetiva libre de presiones externas en torno al posible uso de armas químicas en Damasco.

El presidente francés Francois Hollande afirmó que “la masacre química de Damasco no puede y no debe quedar impune”. Reiteró que Francia quiere una “acción proporcional y firme”.

Ban Ki-moon, secretario general de Naciones Unidas, indicó que el equipo le informará en cuanto salga del referido país si se emplearon o no armas químicas.

El primer ministro británico reconoció que la acción militar requiere del visto bueno del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. En la víspera, Londres ya se había pronunciado en ese sentido.